Bajo este lema de Manos Unidas, de la campaña contra el hambre de este curso escolar, hemos puesto en el colegio nuestro corazón y también nuestra aportación económica para ayudar a los más necesitados.
Antes del inicio de la campaña, se analizó en el aula la situación que atraviesan distintas comunidades de países del Sur, y el poco esfuerzo que supone para nosotros conseguir que los proyectos para el desarrollo de estos pueblos que lleva a cabo Manos Unidas salgan adelante. Acceso a la educación, grano para plantar o material sanitario han llegado a algunos de los 800 millones de personas que en este año engrosarán las filas de los pobres del
mundo, azotados además este año por la pandemia del Covid-19.
La colaboración de nuestro centro, con una recaudación de 3000 euros, se sumará a la de otras muchísimas instituciones que también colaboran con esta institución de la Iglesia Católica.
La riqueza del mundo está mal repartida, es una indiscutible realidad; tanto como que en nuestras manos está el cambio.